La Tercera Sección Electoral de la provincia de Buenos Aires es la que mayor cantidad de población reúne, con más de cuatro millones y medio de votantes. Gran parte del resultado de la elección bonaerense se define entre ella y la Primera –que comprende el oeste y el norte del Conurbano–, ya que juntas duplican los votos de las otras seis secciones electorales de la provincia. La Tercera es además conocida por favorecer invariablemente, y por bastante margen, al peronismo, capital que el Frente Todos se esfuerza por sostener y ampliar lo máximo posible en los comicios de agosto y de octubre, para ganar en primera vuelta.

En el centro de la Tercera Sección, entre los diecinueve partidos del sur del Conurbano que abarca, se encuentra Florencio Varela. Está gobernado por el peronista Andrés Watson, intendente interino que busca la continuidad de su cargo, y lleva a Arnaldo Medina –vicerrector de la Universidad Nacional Arturo Jauretche– como candidato a primer concejal.

Mónica Romero y el intendente Andrés Watson, apertura del ciclo lectivo 2019 en la Primaria 44 de Florencio Varela

Acerca de la situación actual de Florencio Varela y las posibilidades de una nueva política local y provincial a partir de las elecciones, conversamos con Mónica Romero, docente, directora de la Escuela Primaria 44 del distrito y precandidata a concejala por el Frente de Todos en Varela.

La fuerza y la organización en el territorio, tanto de los municipios como de las organizaciones sociales, fueron sumamente importantes para contener los grados de conflictividad desatados por las políticas del gobierno nacional. ¿Cuáles fueron las principales problemáticas que aparecieron en Varela a causa de estas políticas económicas y sociales? Y, en tal sentido, ¿qué medidas pudieron ustedes llevar adelante para contenerlas?

En Florencio Varela las políticas neoliberales del gobierno nacional y el gobierno provincial impactaron directamente en la calidad de vida de cada uno de nuestros vecinos, de cada una de las familias. Esas políticas generaron desocupación y falta de alimentación en las casas, producto del aumento de los alimentos: en la canasta familiar la inflación fue tan exorbitante que es imposible resolverla solo mediante la Asignación Universal por Hijo –considerando, además, que no contó con el incremento que venía teniendo–. Además, por el aumento de la canasta escolar y el aumento del transporte, nuestros alumnos de la escuela pública de cada comunidad de Florencio Varela no pudieron continuar concurriendo. Es decir, perdieron el derecho de acceso a la educación, la permanencia y el egreso del sistema educativo.

Para contener este desmembramiento social, en Varela se implementaron distintas estrategias. Para que la gente pudiese comprar los alimentos a menor costo, el municipio organizó ferias con productores, a quienes se les permite vender en la plaza céntrica, frente a la Municipalidad. Allí se venden alimentos preparados y para preparar. La feria de emprendedores les permite a los pequeños productores poder vender sus productos, a la vez que abarata el costo para los vecinos. Lo mismo ocurre con las ferias organizadas en cada uno de los barrios, donde los vecinos pueden acceder también a la Garrafa Social.

Feria de productores en Florencio Varela

Además, coexisten un sinnúmero de actividades en los espacios públicos, organizadas desde el municipio. A través de la Secretaría de Cultura, y junto con los distintos espacios culturales existentes, llegaron a las escuelas obras para los niños pequeños, para los más grandes, para los estudiantes de escuela secundaria. Fueron políticas importantes, implementadas de forma directa, asumidas por el municipio.

Una cuestión importante para tener en cuenta es que Varela es un distrito con muy pocos aportes por parte de sus vecinos, porque hay una población bastante grande que no puede hacerlos. Por eso necesita de la Nación y de la provincia. En este sentido, hay dos cuestiones que me gustaría marcar y que tienen que ver con la infraestructura escolar. Durante estos años, bajo la gestión de Cambiemos, no se construyó una sola escuela, un solo jardín de infantes. Y tenemos, en primer lugar, una necesidad muy importante de creación de jardines, porque hay seis mil niños fuera del sistema formal en ese primer nivel de escolarización. En segundo lugar, hay una deuda muy grande con el nivel secundario. Dos cuestiones que atañen al Estado provincial, porque es el garante de la educación en toda la provincia y sobre los que la gobernadora Vidal no invirtió un centavo. En el año 2015 quedaron varias obras sin resolver: la del Jardín del barrio Las Alicias, por ejemplo, que estaba avanzada un noventa por ciento y solo restaba muy poco para que funcionase, sigue esperando. O la Escuela 42, donde se abandonó la obra hasta que los padres tomaron el edificio escolar; recién ahí volvieron a continuarla, gracias a esa movilización de la comunidad educativa y la contención sindical del SUTEBA.

Con este panorama que señalás, ¿cuál es la evaluación de la gestión actual de la provincia, sobre todo en relación a estos problemas que atraviesan hoy al municipio? Y, pensando en un cambio de gestión peronista, ¿cuáles serían las principales demandas ante un nuevo gobierno provincial?

El gobierno provincial no articuló con el gobierno municipal ninguna política ni ninguna gestión. La gobernadora Vidal tiene la misma política que el gobierno nacional: en los distritos donde los gobiernos no eran del mismo signo político, decidió no enviar los fondos correspondientes para la resolución de los problemas. No se contó con dinero para resolver el asfaltado de calles, las luminarias, la infraestructura de las escuelas. En Varela, a través del ajuste, se ahogó la economía del municipio que, si no generaba acciones con fondos propios, le resultaba imposible llevar adelante cualquier política pública.

Pensando en un futuro gobierno peronista, la primera cuestión es tratar de salir de la situación en que va a quedar la provincia de Buenos Aires: una provincia rica pero muy endeudada. Una provincia que tiene posibilidades, pero a la que el neoliberalismo sumió en una situación de mucha desprotección. La primera instancia, entonces, es recuperar la provincia, desendeudarla –que no va a ser poca cosa– y generar políticas púbicas que permitan volver a incrementar puestos de trabajo y reactivar la economía, para poder darle funcionamiento. Luego, será central avanzar con los problemas de infraestructura que tenemos no solo en las escuelas, sino en el hospital público.

Es decir, creo que hay que avanzar en tres ejes concretos: trabajo, salud y educación, que son los pilares fundamentales para poder salir adelante tanto en la Nación como en la provincia. Por sobre todas las cosas, bajo un gobierno que piense en los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires, en la recuperación de sus derechos. Lo que no es menor, porque es la única forma en que uno puede estar bien en el lugar donde vive: con los derechos garantizados a través del Estado en su plenitud.

El intendente Watson lleva en la cabeza de concejales a Arnaldo Medina, vicerrector de la Universidad Nacional Arturo Jauretche y médico y ex director del Hospital El Cruce. Ambas fueron inversiones estratégicas de la anterior gestión nacional. ¿Cómo repercutió la apertura de estas dos instituciones para el desarrollo de la zona, y cómo se encuentran hoy?

Abrazo de trabajadores médicos al Hospital El Cruce, 2018

Estas dos inversiones espectaculares que hizo el gobierno de Cristina y de Néstor Kirchner fueron centrales para el desarrollo de Varela. En un caso, no solo para la salud de todos los varelenses, sino de otros dos distritos con los cuales compartimos el Hospital, porque es Interzonal: Berazategui y Quilmes. Como se trata de un hospital de alta complejidad, las familias de Varela, Quilmes y Berazategui no tenían que trasladarse a otro hospital, podían atenderse en su propio distrito, lo cual era fundamental. La salud estaba totalmente cubierta, había otra esperanza, una proyección más concreta y clara en el propio territorio. Arnaldo Medina fue el primer director del Hospital, previo a su regencia en la Universidad.

La Universidad, a su vez, fue algo muy soñado por los varelenses, hay mucho trabajo de la comunidad detrás. Porque, cuando llega la Universidad, llegan otras posibilidades de educación. Es la implementación del ascenso social: en la Universidad de Varela están las primeras generaciones universitarias, de los hijos de nuestros vecinos trabajadores, están nuestros hijos y también los papás de mis alumnos (yo soy directora en una escuela primaria). Es importantísimo que Varela tenga todos los niveles educativos; pero, sobre todo, que a esa universidad lleguen los trabajadores, que puedan crecer cultural y socialmente. Esto es lo que enorgullece y redobla la apuesta en ese ámbito académico.

Movilización en defensa de la UNAJ, agosto de 2018

Por esto me parece fundamental contar cómo las políticas neoliberales repercutieron tanto en el Hospital como en la Universidad, con el desfinanciamiento y la falta de inversión. Obviamente, lo que esto genera es la imposibilidad de resolver las situaciones de salud de todos los pacientes que se atienden en el Hospital, y los problemas salariales de los docentes y no docentes en la Universidad. También en la infraestructura de ambos espacios, en los insumos que requiere un Hospital de alta complejidad como el que tenemos en Varela y los que una Universidad Pública necesita para poder llevar adelante su tarea.

La elección en la Tercera Sección Electoral que integra Florencio Varela se considera central por el caudal de votos que acumula, para una victoria tanto de las fórmulas nacionales como las provinciales. ¿Cómo ves las posibilidades para cada una de las dos fórmulas que se disputan ambas elecciones: la del Frente de Todos y la de Cambiemos (ahora “Juntos por el Cambio”)?

Tal como ustedes plantean, la elección en Varela y en la Tercera Sección Electoral es fundamental para aportar tanto a la elección nacional y en la provincial. Florencio Varela se ha caracterizado, en cada elección, por aportarle al peronismo nacional y provincial un porcentaje muy importante de votos, que tenemos que sostener y aumentar. Además, estamos convencidos de que el Frente de Todos tiene que ganar en primera vuelta. Por eso nosotros estamos militando mucho esta elección, con la convicción de que tenemos que obtener la mayor cantidad de votos posibles, incluso superar el porcentaje de votos que hoy –de acuerdo a las encuestas– sería del 69 por ciento para el Frente de Todos.

Cotidianamente estamos en los barrios, discutiendo con cada uno de los vecinos sobre la situación en la que hoy estamos y la situación que nos merecemos tener: esto es, la recuperación de los derechos que teníamos hace no mucho tiempo, hace cuatro años, que nos fueron negados o no se profundizaron o retrocedieron con el gobierno de Cambiemos. También discutimos sobre la elección de Cambiemos con los vecinos cuando recorremos el distrito. De ahí lo que surge es un cada vez menor porcentaje de votos para ellos. Por eso creemos que esta elección la vamos a ganar muy bien.